Y soñar y cantar, bailar y soñar,
Sol nubes para que mas,
Si no hay nada más,
Habla ahora que nadie te escuchará,
Todos en su mundillo sin nadie a quien escuchar.
Tirate al mar que ya aprenderás a nadar en nuestros sueños de felicidad,
Canta ahora que te acompañaré al ritmo del compás.
Llego la hora de hablar:
Todo ha pasado sin nada en que pensar,
Tu y yo nos echamos sin ver la realidad.
Creímos estar en un sueño donde todo era felicidad.
Ahora solo abre los ojos y descubre la realidad,
Verás que no podrás compararla, ya que no cambia de tus sueños de felicidad.
Te prometo que nada cambiará,
Que el brillo de la luna brillará cada día más,
Que el sol mañanero te despertará al ritmo de las olas del mar que tu corazón palpitará.
Te prometo que mi mano nunca se soltará y que agarrados el camino nunca acabará.
Que no me valdrá una mano para contar las sonrisas que arrojes al pensar, que todo nos ira genial, que mil sitios pisaremos sin tener que volar, sin tener que saltar ni soñar.
Ahora mantén los ojos abiertos, y cantemos en la orilla del mar,
Paseemos por los barrancos de los altos montes de este mundo y grita, ¡si!, grita conmigo el te quiero que nos borrara los malos sueños que algún día soñemos.
Sonríe, ¡si!, sonríe, que me valdrá más que mil palabras de verdad.
No todo termina en un si quiero… todo lo contrario.
¿Quién organizará todo el bodorrio en la ermita más alta del mundo?
¿Quien organizará
¿Quién invitaremos para que nos tire arroz sobre nuestras cabecitas huecas?
¿la verdad?, no me importa nada.
Solo sé que será la ermita más bonita del mundo, la mayor locura de viaje sin rumbo de Luna de miel de nuestras vidas y los compañeros mas pesados del mundo para la mejor escusa de raptarte y fugarnos.